Historia de la Sociedad Peruana de Urología
History of the Peruvian Society of Urology
José A. Arias-Delgado
Servicio de Urología, Hospital Nacional Guillermo Almenara, Lima, Perú
Correspondencia: José A. Arias-Delgado. E-mail: joseariasd@gmail.com; jose.ariasd@essalud.gob.pe
La Sociedad Peruana de Urología (SPU), desde su fundación, ha desempeñado un papel significativo en el desarrollo de esta especialidad en Perú. En el marco de su nonagésimo cuarto aniversario presentamos la evolución de nuestra institución, destacando los hitos, los avances y el impacto de sus miembros en la evolución de la urología en el país.
Fundación y primeros años (1932-1950)
La SPU fue fundada el 24 de agosto de 1932 por Ricardo Pazos Varela y seis urólogos más en la ciudad de Lima, con el profesor George Marion, un urólogo francés, como presidente honorario. Inicialmente, la sociedad también incluía especialidades interesadas en el tratamiento de las enfermedades venéreas.
Durante este periodo, la SPU comenzó a establecerse como una entidad médica reconocida, y los urólogos fundadores tuvieron un papel crucial en su mantenimiento y dirección. La SPU enfrentó el desafío de desarrollar la disciplina en un país con recursos limitados y una infraestructura médica en formación. A pesar de la falta de renovación en sus miembros y la escasa participación de nuevos urólogos, se realizaron esfuerzos significativos para promover la educación y la formación en urología.
La primera etapa, denominada «formación», abarcó desde 1932 hasta 1960. Durante este tiempo, la SPU se centró en establecer unas bases sólidas para la práctica de la urología en Perú, organizando reuniones y promoviendo la colaboración entre los profesionales de la salud. Sin embargo, la falta de un sistema formal de educación y la escasa documentación histórica limitaron el crecimiento de la especialidad en sus inicios.
Desarrollo y reconocimiento (1950-1980)
A fines de la década de 1950 y principios de la de 1960 apareció en escena una nueva generación de urólogos encabezada por Eduardo Delgado Castro y Luis Maggiolo, lo que hizo que la urología en Perú comenzara a ganar reconocimiento tanto nacional como internacional. Se establecieron programas de formación más estructurados y se promovieron investigaciones que contribuyeron al avance de la especialidad. En 1960, la SPU organizó el Primer Congreso Peruano de Urología y el VII Congreso de la Confederación Americana de Urología. Desde entonces, continuó promoviendo congresos nacionales e internacionales, permitiendo a los urólogos peruanos intercambiar conocimientos y experiencias con colegas de otros países.
El III Congreso Peruano de Urología, celebrado en Lima en 1971, fue un evento significativo que reunió a destacados urólogos de la región. Este congreso no solo facilitó el intercambio de ideas, sino que también ayudó a posicionar a la SPU en el contexto de la urología latinoamericana. Durante este periodo se publicaron numerosos trabajos científicos que documentaron los avances en técnicas quirúrgicas y tratamientos, lo que contribuyó a la consolidación de la urología como una especialidad médica respetada en Perú.
Modernización y avances tecnológicos (1980-2024)
A partir de la década de 1980, la urología en Perú experimentó una modernización significativa. La introducción de nuevas tecnologías y técnicas quirúrgicas, como la laparoscopia, y de subespecialidades como la urooncología, mejoró la calidad de la atención urológica en el país. La SPU también comenzó a enfocarse en la formación continua de sus miembros, organizando cursos y talleres que abordaban temas de vanguardia en la especialidad.
La Revista Peruana de Urología, que comenzó a publicarse en este periodo, se convirtió en un medio importante para la difusión de investigaciones y avances en la especialidad. La calidad de las publicaciones mejoró con el tiempo, reflejando un enfoque más global y profesional. En 2004, el Dr. Alfredo Martínez Velasco fue nombrado editor-director de la revista, lo que marcó un nuevo capítulo en la historia de la publicación. Se realizaron esfuerzos para mejorar el contenido y la presentación de la revista, lo que contribuyó a su reconocimiento en el ámbito científico.
Durante la presidencia del Dr. Luis Zegarra, la SPU adquirió su propio local, inaugurado en junio de 2004; desde entonces, ha sido posible realizar reuniones institucionales tanto presenciales como virtuales. En los años posteriores, la SPU logró establecer relaciones institucionales con asociaciones internacionales, como la American Urological Association, la European Association of Urology y la Confederación Americana de Urología, así como con asociaciones de países vecinos.
Retos y oportunidades
A pesar de los avances logrados, la SPU ha enfrentado varios desafíos a lo largo de su historia. La falta de recursos y la necesidad de una mayor infraestructura médica en el país limitaron el desarrollo de la especialidad en ciertas áreas. Sin embargo, la perseverancia de sus miembros y el compromiso con la formación continua permitieron superar muchos de estos obstáculos.
La creación de la I Convención de Residentes de Urología en 2010 fue un paso importante para involucrar a las nuevas generaciones de urólogos en la SPU. Este evento no solo promovió la educación y la formación, sino que también fomentó un sentido de comunidad entre los residentes y los urólogos establecidos.
Reflexiones y futuro
La SPU actual es el resultado del trabajo realizado por sus miembros desde sus orígenes y de su lucha por lograr una mejor institución académica. Preservar nuestra historia nos ayuda a conservar nuestra identidad, aprender de nuestros éxitos y fracasos, y nos sirve como fuente de inspiración y motivación para continuar esforzándonos por una comunidad urológica con valores de colaboración y trabajo en equipo, donde prime la fraternidad sobre la competencia. El objetivo es fortalecer la sociedad y su posición en el contexto de la urología mundial. La historia de la SPU es un testimonio del compromiso de sus miembros con la salud pública y el desarrollo de la especialidad en el país.